Manchas blancas en las uñas

Por las Dermatólogas Dra. Lídice Dufrechou y Dra. Alejandra Larre Borges.
No se deben a falta de calcio, como suele creerse, sino a diferentes agresiones.
Las uñas, tanto de las manos como de los pies, tienen un rol fundamental en el aspecto e imagen corporal. Cambios en su consistencia, grosor, coloración y percepción al tacto pueden ponernos en la pista de situaciones patológicas. Al igual que la piel o el pelo, ellas hablan mucho sobre la salud en general.
En más de una oportunidad hemos observado la presencia de manchas blancas en las uñas de niños y no tan niños. ¿A qué obedecen? ¿Son por falta de calcio como se dice popularmente? ¿Hay algún tratamiento eficaz?
Composición
Las uñas están formadas básicamente por proteínas, entre las cuales la principal es la queratina. Su coloración se ve influida por la de la lámina (el sector duro al que llamamos uña propiamente) y por la del lecho, que es la parte por debajo de la lámina, que es piel y que queda expuesta cuando, por diferentes causas, se arrancan las uñas.
Tanto las alteraciones del lecho como de la lámina ungular o “uña” propiamente dicha pueden llevar a la aparición de manchas.
Cambios de coloración
Los cambios de coloración en las uñas responden a muchas causas, desde golpes banales hasta infecciones e, incluso, tumores.
Estas afecciones pueden presentarse con coloraciones que van desde el blanco o amarillo hasta verde, marrón, rojo o negro.
Las manchas blancas en las uñas son llamadas “leuconiquias” y estas pueden tomar varios aspectos. Según su tamaño, la tonalidad del blanco y la presencia o no de otras alteraciones en la uña, se pueden diagnosticar o descartar diferentes enfermedades. La verdadera leuconiquia puede ser total (compromete todas las uñas y toda su superficie) o parcial (la mancha suele manifestarse en forma transversal, en puntos, en línea). La leuconiquia total puede ser hereditaria o asociada con otras enfermedades generales, como infecciones, falla renal, entre otras.
Las manchas blancas, que popularmente suelen vincularse a la falta de calcio, corresponden a una coloración blanca como la leche, opaca, en forma de pequeñas líneas cortas transversales al crecimiento de la uña, que pueden aparecer en una o varias de ellas y son frecuentes tanto en las de las manos como en las de los pies. Se ven con mayor asiduidad en niños, aunque pueden aparecer también en adultos.
Estas manchas blancas se han atribuido al déficit de calcio y otras vitaminas; sin embargo, no existen pruebas de que esta sea su causa.
Suelen ser el resultado de una lesión en la uña secundaria debido a una agresión, como el golpe repetido (por ejemplo durante el uso de un teclado), el traumatismo generado por el hábito de “comerse las uñas” o el de “golpetearlas” unas con otras o sobre superficies. También agredimos a las uñas con los productos cosméticos que aplicamos en ellas, esmaltes, quitaesmaltes y los instrumentos que se utilizan en manicuría para retraer o cortar la cutícula y el torno, entre otros.
Además, estas manchas pueden aparecer en ausencia de esas situaciones y esto se explica porque hay traumatismos o “microtraumatismos” que se deben a pequeñas agresiones que nuestras uñas sufren durante el día y que ni siquiera identificamos como tales.
Estos traumatismos o microtraumatismos generan un daño transitorio en la formación de la uña y las manchas representan este daño. Es por este motivo que, en estos casos, no se realizan tratamientos; es suficiente con esperar que la uña crezca y que se pueda recuperar la normal formación del lámina.
Es importante recalcar que en aquellos casos en que las manchas persistan más allá de 4 meses se aconseja realizar una consulta con un dermatólogo para ver si estamos frente a este hecho banal o a algún proceso de enfermedad.